Un héroe sin capa
Desde niño me enseñaron las épicas batallas e historias bíblicas. Una honda y una piedra, una vara, vasijas de barro, y detrás de aquellas hazañas estaban hombres admirables, increíbles, asombrosos, personas demasiado sorprendentes para ser cierto. Abraham, el impaciente. José, el presumido. Moisés, el pretextoso. Sansón, el quemimportista. Saúl, el todopoderoso. David, el latinlover. Juan y Jacobo, los malgeniados. Pedro, el impulsivo. Pablo, el celoso […]